En los países más industrializados perdieron el norte confundiendo “libertad” con “libertinaje” y “derechos” por “exigencias”
Universitarios alemanes exigen que se instalen ‘gloryholes’ en las aulas para la ‘inclusión queer’
Un grupo de estudiantes de la Universidad alemana de Augsburgo exigió que se instalaran “gloryholes”, utilizados para el sexo anónimo, en las salas de conferencias en una propuesta que se presentó al cuerpo estudiantil de gobierno de la escuela, informa Reduxx.
Un “gloryhole” se conoce típicamente como un pequeño agujero excavado en una pared que da acceso a la actividad sexual sin ver a los participantes.
La propuesta decía: “Tres agujeros gloriosos deben estar en el centro de la sala de conferencias frente a la entrada… Estos deberían ser construidos por el Departamento de Espacio y Construcción y mantenidos por la administración del edificio.
Incluía una lista de especificaciones estructurales que harían accesibles los Gloryholes para discapacitados.
“Deben ser insonorizados y opacos. Deben diseñarse para que no tengan barreras lo más posible, la altura debe ser ajustable y debe haber manijas en la pared a las que se pueda agarrar. Las luces deben ser regulables y se debe instalar un posible acolchado para las rodillas. También se necesitan botes de basura”.
Según Press-Augsburg la universidad ofrece un panel informativo para las solicitudes de los estudiantes sobre instalaciones, recursos, etc. La función Gloryhole fue solicitada supuestamente diez veces.
Los estudiantes que presentaron la propuesta exigieron que la propuesta fuera votada por el cuerpo estudiantil, argumentando que la solicitud era la más popular en el panel de información y que “un agujero glorioso contribuiría a la diversificación en el campus, ya que el fetichismo también podría experimentarse o vivirse en la universidad”
“El sexo puede ser una actividad relajante, que puede resultar muy útil en la vida universitaria cotidiana, a menudo agotadora. La reducción del estrés asociada garantizaría un ambiente de trabajo más positivo en el campus”, continuaron.
¡Fin de mundo!
“Además, los extraños se reunirían para crear una experiencia y un espacio de vida compartido y conectarse en un nivel muy alejado de la vida cotidiana. Esta forma de conexión puede proporcionar una mejor comprensión de los diferentes cuerpos y también puede tener un efecto empoderador, en el sentido de que el propio cuerpo puede ser experimentado no solo como un límite, sino también como un espacio de posibilidades”.
“Construir los Glory Holes permite a la universidad [representar] un espacio crítico con la heteronormatividad, ya que el kink debe entenderse como una práctica no heteronormativa. Este claro posicionamiento queer liberaría el potencial para una mejor participación en la vida universitaria cotidiana de los estudiantes queer y, por lo tanto, aumentaría su [medio de vida], su sensación de seguridad y su bienestar”.
En respuesta, un grupo cristiano de la universidad escribió una carta abierta al presidente, en la que decía: “rechazan firmemente el establecimiento de agujeros gloriosos en la Universidad de Augsburgo”.
“Su instalación en una universidad, lugar que debería promover la educación, la investigación y el desarrollo personal, sería absurda e irresponsable. Es difícil imaginar cómo se podría plantear una idea así”, concluyó.
La propuesta fue rechazada por el cuerpo estudiantil gobernante pero aun así causó una ola de reacciones negativas y llamó la atención en las redes sociales después de que la periodista Anabel Schunke la publicara en X.
“A la suciedad ideológica en algunas universidades alemanas le sigue constantemente la suciedad cargada de bacterias en los baños asociados. La buena noticia es que la [Asociación de Estudiantes de Ausburgo] nunca ha representado la opinión mayoritaria de los estudiantes. Entonces hay esperanza”, respondió un usuario.
